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Imperceptible, Tanto que algunos humanos han de caer atrapados en ella.

 

 

Asi estaba planeada la experiencia de la telaraña gigante en el Jardín Botánico de la ciudad de Bogotá.

 

 

 

La obra estaba ubicada en un espacio de 12 x 6 mtrs . y casi como las originales- era imperceptible al transeúnte, quien al notarla, la abordaba con la misma curiosidad que se analiza una telaraña entre las hojas de una planta en el patio trasero de la casa. El cambio de escala contrastaba con el movimiento natural que permitía su diseño por partes ajustables.


 

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